No creo que decirles "maestros del kitsch" sea adecuado.
No es que la banda sea mala. Me queda claro que son uno de los estandartes actuales de la música. Lo que sucede es que es tanto el alboroto que causan, se van tan rápido los boletos para sus conciertos y se esperan con tanta impaciencia sus discos que es inevitable despertar cierta suspicacia. Deidades hipsteriles quizá sea un término más prudente.
Ejemplo: hace más o menos tres semanas, la banda "desapareció" de sus redes sociales. Facebook, Twitter, Instagram y todas las que se les ocurran amanecieron, literalmente "en blanco" y la gente enloqueció; hace cosa de dos semanas, apareció el primer sencillo del "A Moon Shaped Pool" y se convirtió, literalmente, en un escándalo: Radiohead viene con nuevo disco.
Hace un par de días lanzaron su noveno material en tiendas digitales y esto se traduce en que está por arribar el tren del mame. Cuando menos en México, la gente se sube durísimo. Tanto así, que ahora a mí me cuesta trabajo decir que el nuevo disco, ese que van a presentar en octubre en la ciudad, y que estoy por compartirles, me agradó.
Hace un par de días lanzaron su noveno material en tiendas digitales y esto se traduce en que está por arribar el tren del mame. Cuando menos en México, la gente se sube durísimo. Tanto así, que ahora a mí me cuesta trabajo decir que el nuevo disco, ese que van a presentar en octubre en la ciudad, y que estoy por compartirles, me agradó.
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